Institución Badra junto al Consejo Iberoamericano de Coaching y Liderazgo, organizó el Primer Congreso Internacional ONLINE de Coaching para la Vida, abierto a todas las personas u organizaciones que quieran conocer el coaching profesional, con el objeto de establecer un espacio de aprendizaje, actualización difusión y esclarecimiento donde se compartieron conocimientos, actualizaciones, innovaciones y herramientas de alto desempeño propias del Coaching, destinadas a renovar perspectivas y mejorar resultados.

El congreso tuvo un gran impacto internacional logrando convocar a 7600 coaches certificados y recién iniciados en su formación, de Argentina, Uruguay, Brasil, Chile, Paraguay, Bolivia, Ecuador, Costa Rica, Perú, México, El Salvador, Santo Domingo, Nicaragua, Venezuela, Colombia, Filipinas, España, Estados Unidos de América y residentes de habla hispana en diferentes países de Europa.

Durante su desarrollo Intercambiaron valiosos momentos de conversaciones y experiencias con participantes y disertantes de distintas culturas, con una mirada hacia el futuro, para mejorar la consolidación de sus conceptos técnicos y el manejo de herramientas profesionales ante los desafíos del mercado actual y futuro.

El coaching es una profesión emergente y en evolución; cuyo propósito es expandir el potencial personal y social; una disciplina profesional enfocada en la acción, a través de un proceso dialógico, que habilita nuevas formas de ser y/o hacer, cuyo fin es que el coachee (cliente) sea capaz de tomar decisiones desde sí mismo y por sí mismo para llevar a cabo acciones en función de lo que desea lograr, alcanzando aprendizajes conscientes y voluntarios.

La relación profesional en el Coaching se da en sesiones conversacionales, dentro de una plataforma de respeto y autonomía, cuya finalidad es que el coachee (cliente) pueda distinguir su manera de observar e interpretar la realidad y generar acciones derivadas de la misma, que le permitan aprendizajes transformacionales que le habiliten diferentes interpretaciones y acciones y, en consecuencia, surja una nueva perspectiva de su mundo.

La práctica del coaching es, por definición, no impositiva. Un coach no es un tutor, mentor, consultor, psicólogo o terapeuta. El coach no está allí, para dar consejos, para emitir sus inclinaciones personales, para decirle al coachee lo que él o ella harían en su lugar, o para imponer sus puntos de vista. Su propósito, por el contrario, es poder servir de espejo para que el coachee logre mirarse con otros ojos y le sea posible descubrir los obstáculos de su propia mirada.

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